Por la derecha, la izquierda y hasta el mediopensionismo. Ahora el artículo es de Jesús Bastante. Él sabrá la fiabilidad de sus fuentes. Yo me limito a señalar tantas coincidencias. COPE y 13TV no son mi radio ni mi televisión. A mí personalmente no me gustan pero tampoco son el centro de mis preocupaciones eclesiales. Hay otras muchas csas que también me gustan muy poco o incluso menos. Tengo también claro que una nueva radio o televisión puede ser incluso peor que lo que ahora hay. Pero ni se me ocurre mover un dedo en defensa de esa apuesta mediática que cuesta una pasta que pagamos los católicos y marcha sin rumbo hacia no se sabe donde.
Leo en diversos artículos que se trataba de una apuesta de Rouco. No sé si será cierto pero, de serlo, esa apuesta está a punto de valer nada. Porque Rouco se va. Estuviera o no acertado en la apuesta. Blázquez me parece incapaz de apostar. Ni por eso ni por lo contrario. Osoro sería capaz pero es el segundo y además carece de respaldo que le permita un liderazgo. Para el que sin duda estaría más capacitado que el number one.
Algunos cambios han comenzado. En COPE han sustituido ya a Buruaga por Expósito. Y en 13TV disparan sin ocultarse contra Jiménez, Cuesta y Merlos. Y por supuesto están en los medios figuras menos mediáticas pero que son las que llevan, no falta quien dice que hasta con procedimientos mafiosos, los hilos del guiñol. Y luego está la cuestión económica. Muy manipulable. Es fácil vender el sinsentido de que los medios se lleven mucho más dinero que Cáritas. Aunque pudiera ser que sin medios Cáritas tuviera menos que llevarse.
Pues yo a verlas venir. Si les dan una guantada, no es en mi cara. No sentiré el menor dolor. Jamás tuve que ver nada con ellos ni ellos conmigo. Y si ganaran, una vez más, pues yo seguiría exactamente igual. Ya he dicho que no me gusta el producto. Pero ni vivo de él ni tengo que merendarlo.
¿Se está aprovechando una crisis para dañar a la Iglesia? Es posible. Pero tampoco soy yo quien pueda hacer algo al respecto. Eso depende de los obispos. Sólo de ellos. Y tendrán que dar la cara también en ello. Pero ya ven de lo que son capaces. Todo el problema ha estado estos tres últimos años con el obispo Piris al frente de la Comisión Episcopal de Medios. Buscan a uno menos cualificado y no lo encontrarían. Pues aviados van si piensan que con esos mimbres van a hacer un cesto por malo que sea.
Ya veremos quienes ganan y pierden. Lo peor es que una vez más la que va a perder es la Iglesia. En eso, una vez más, los católicos tampoco hemos sido consultados. Lo nuestro, como antes, como siempre, pagar. Y algunos empiezan a aburrirse de pagar al enemigo o al menos a los inútiles.
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