A mí no me hace gracia ninguna. Pero da la impresión de que a Sistach, Osoro, Pujol, Maradiaga. Tettamanzi, Amigo, Porras… sí. Mientras sus fotografías y sus textos sigan apareciendo debajo de viñetas así no existen argumentos decisivos para concluir que esos obispos no aprueban esas gracias tan graciosas. Para ellos. ¿Les veremos algún día con una columna en Interviú? Tampoco hay argumentos decisivos para concluir que no.