Tener un gato (o varios) en casa es muy cómodo, necesita poco esfuerzo por nuestra parte. A diferencia de los perros, no tienes que sacarlos a pasear para que hagan sus necesidades, tan solo has de preocuparte de que tengan comida, agua y un arenero limpio. Pero, ¿qué arena elegir para su arenero?
Hasta hace no muchos años la elección era muy sencilla porque no disponíamos de la variedad que tenemos ahora. No pasábamos de una arena absorbente básica de bastante mala calidad.
Afortunadamente eso ha cambiado y ahora podemos elegir entre un gran abanico de posibilidades. Recuerda que la última palabra la tiene tu gato. Puedes elegir la mejor arena del mundo pero si a él no le gusta…
Arena básica absorbente. Sepiolita.
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La arena más básica para el arenero de nuestro gato. De color gris y compuesta principalmente de un mineral muy absorbente llamado sepiolita.
Es muy barata y se puede encontrar en cualquier sitio (hasta en supermercados). Pero hasta ahí llegan sus ventajas porque es la peor arena que podemos usar (en mi opinión, claro). Produce mucho polvo y no dura nada, por lo que tendremos que estar cambiándola casi diariamente. La orina del gato tiene un olor muy fuerte y de no hacerlo, el arenero será una fuente de olor desagradable constante. Y lo que es peor, el gato podría dejar de usarlo.
Los gatos son animales tremendamente limpios y si el arenero está sucio y no es de su agrado, preferirá hacer sus necesidades fuera.
Como curiosidad, España es un gran productor de este mineral y el mayor yacimiento se encuentra en la Comunidad de Madrid.
Arena aglomerante. Bentonita.
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Una arena compuesta principalmente de una arcilla llamada bentonita. Con un enorme poder de absorción y mucho más fina que la de sepiolita, la arena aglomerante consigue que podamos recoger con una pala tanto los residuos sólidos como los líquidos. Cuando cae algún líquido sobre esta arena, inmediatamente es absorbido formándose “pelotas” sólidas muy fáciles de recoger.
La ventaja es evidente ya que nos permite tener el arenero siempre limpio y sin ningún residuo si nos preocupamos de recogerlos una o dos veces al día. Tan solo tenemos que ir añadiendo arena según se necesite.
He pasado años usando este tipo de arena, en concreto la Purina Tidy Cats (que empezó llamándose Crystal Blend y ahora se llama Dual Power). Pero hace unas semanas pasé a otra arena aglomerante pero de diferente composición de la que hablaré un poco más abajo.
Como aspecto negativo hay que decir que al ser tan fina, es fácil que el gato se la lleve pegada en las patas. Y que es verdad que el arenero permanece limpio mucho tiempo, pero siempre tendremos que vaciarlo entero alguna vez y limpiarlo concienzudamente. Aunque recojamos diariamente los residuos, siempre queda algo y con el tiempo el arenero termina oliendo y perdiendo su capacidad de absorción. Lo que tarde en hacerlo dependerá de la calidad de la arena, el número de gatos…
También levanta polvo aunque eso depende mucho de la marca que elijamos. Para los alérgicos o los más sensibles, hay una que asegura ser en un 99,9% libre de polvo (Sanicat Clumping Gold).
Cristales de sílice.
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Más parecidos estéticamente a la sal gorda que a la arena, los cristales de sílice también poseen una gran capacidad de absorción. Se comportan como la arena de sepiolita pero son mucho más eficaces. Los líquidos son absorbidos por los cristales reteniendo también su olor.
Con el uso, los cristales van tiñéndose hasta llegar a un amarillo oscuro, momento en el que hay que vaciar el arenero por completo y rellenarlo con sílice nuevo.
Este tipo de arena fue la primera que usé y lo hice durante bastante tiempo. Pasé a la arena aglomerante porque en mi opinión, con más de dos gatos la arena de sílice no da abasto y empieza a oler en muy poco tiempo.
Materiales ecológicos (papel reciclado, bambú…)
Aquí englobo a un montón de materiales diferentes que poco a poco se van popularizando. Entre ellos está la “arena” que uso actualmente: Cat’s Best Oko Plus. Fabricada con fibras vegetales, funciona exactamente igual que una arena aglomerante. En realidad diría que incluso mejor porque aglomera todavía más rápido y no huele nunca. En su defecto diré que es la “arena” que más esparcen mis gatos por la habitación. Supongo que se debe a que es más ligera y menos fina que una arena de verdad.
Y tiene una ventaja añadida muy importante: es completamente biodegradable, por lo que se puede tirar por el inodoro. Para los que tienen el arenero del gato en el baño es un alternativa perfecta, permitiendo además meterlo en la bañera al no haber ningún riesgo de atascar el desagüe con lo que pueda tirar el gato fuera.
Otro de los nuevos productos que se ve cada vez más es el papel reciclado y comprimido. Lo he probado y no termina de convencerme. Absorbe bien pero dura poco tiempo. Si tiene algo muy bueno es que es muy ligero y cómodo de transportar.
El producto más novedoso que he conocido es el fabricado con bambú, una planta 100% sostenible por su rapidísimo crecimiento. Muy absorbente y biodegradable, pero caro. Supongo que el precio que hay que pagar por ayudar a mantener el planeta.
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